DERECHOS Y DEBERES

El Ciudadano tiene derecho a expresar su opinión por cualquier medio, a viva voz o por escrito, en la calle o en la Prensa en su sentido amplio.
El Gobiernante tiene la obligación de llevar a cabo las políticas necesarias para desarrollar los Programas políticos y para dar respuesta a las necesidades del país.
El Ciudadano tiene derecho a exigir al gobernante que se ciña a las leyes, que aplique el ordenamiento jurídico vigente, que éste sea justo y decente.
El Gobernante tiene el deber de ser fiel al espíritu de las leyes que son iguales para todos. Ésa es su auténtica responsabilidad.
El político en general, y aquí incluimos a toda nuestra clase política, tiene el deber de respetar la supremacía de la ley y de arrimar el hombro para enriquecerla. Y por encima de todo, ha de tener sentido de Estado y no traicionar a este ente enorme y, sin embargo, tan sensible.
Gritar en contra de una aplicación de la ley en su sentido estricto, sin pensar que existe una manipulación partidista y no previendo las consecuencias cifradas en crispación y en imposibilidad de entenderse, no entra dentro de los derechos ni dentro de los deberes.
¿ En qué categoría podríamos incluirlo?